Tengo pendiente el tema de subir un brico sobre la sustitución de las correas del OM617.912, pero resulta que antes de proceder, se me encendió el testigo de desgaste de los frenos, así que decidí abordar este tema y dejar para luego lo de las correas, y como tenía la cámara de fotos preparada... pues me puse manos a la obra.
Para comenzar, empezaremos con el tema de seguridad, así que empezaremos por calzar bien el coche de las ruedas traseras, poner el freno de estacionamiento y levantar el coche, y si es posible, usar un trípode para no dejar el coche apoyado en su gato (no es que el gato no de suficientes garantías, pero yo particularmente prefiero el trípode por ser mas seguro).
Colocaremos un trapo limpio rodeando el tapón de llenado del depósito de líquido de frenos y una bolsa de plástico bajo el mencionado depósito. El liquido de frenos baja de nivel cuando las pastillas se van gastando. Si se completa el nivel antes del cambio de pastillas, es posible el nivel rebose y nos ponga perdida la zona con el líquido sobrante, deteriorando la pintura y demás piezas. Otra opción es sacar un poco de líquido de frenos del depósito usando una jeringa.
Las piezas a sustituir son las siguientes: juego de pastillas de freno delanteras (x4) y cables testigos de desgaste (x4). Yo las compré de la marca TRW (Lucas).
Después de quitar la rueda (en este caso, la izquierda, lado conductor), giramos la dirección completamente hacia el lado contrario (derecho) para poder trabajar con mas espacio.
Nos encontraremos lo siguiente: un montón de roña gris y un espacio rectangular sobre el que comenzaremos el trabajo.
Lo primero que haremos será sacar los pasadores dorados que se aprecian en la parte superior e inferior de la pinza por el lado exterior. Son los que bloquean los pasadores mas gruesos que mantienen las pastillas dentro de la pinza. Para sacarlos basta con desplazarlos hacia arriba con un punzón o un destornillador pequeño. Procurad no deteriorarlos ni perderlos porque son reutilizables siempre.
A continuación, ayudándonos de un punzón largo o una broca (en mi caso) y un martillo, sacaremos los pasadores gruesos de los que hablamos anteriormente. Cuidado que al llegar al final del recorrido suelen salir disparados debajo del coche...
Este es el pasador grueso. Hay que sacar los dos, el superior y el inferior.
A continuación desenchufaremos los cables que nos indican que las pastillas han llegado casi al final de su vida útil. Tirando de ellos salen de su alojamiento. A veces es necesario usar unos alicates para sacarlos porque se endurecen mucho. Hacer este proceso con cuidado de no romper la pieza de plástico donde enchufan en la pinza.
Aquí vemos los cables, una vez desenchufados. Si han estado correctamente conectados esos cables, el interior de esas fundas ha de estar impecable, con la conexión metálica sin óxido y las juntas estancas (en rojo) en perfecto estado.
A continuación, hemos de quitar un par de muelles de alambre que se encargan de evitar que las pastillas de freno se muevan dentro de la pinza y generen ruidos molestos. Para ello nos ayudaremos de un destornillador grande, pero teniendo especial cuidado de no deteriorar los guardapolvos de los pistones de ambos lados, que al estar las pastillas gastadas se encuentran muy expuestos. Podemos proceder como se muestra en las imágenes que siguen.
Aquí podemos ver los muelles una vez extraídos de la pinza. Son similares.
Ahora llegamos a la fuerza!!. Tenemos que introducir el destornillador grande entre el disco de freno y la pastilla, lo mas profundamente posible (quizá tengamos que usar el martillo para ayudarnos un poco), para que haciendo palanca, separar la pastilla gastada del disco hasta que el pistón que la empuja se introduzca por completo dentro del cuerpo de la pinza, para poder sacar la pastilla gastada y poder introducir la nueva. Mucho cuidado con el nivel del líquido de frenos, que puede rebosar y ponernos el coche perdido. Para eso comenté antes lo de colocar un trapo sobre el depósito y un plástico bajo el mismo.
Después de realizar lo anterior, nos queda como se muestra en la siguiente imagen, y podemos sacar la pastilla gastada con mucha facilidad.
Aquí podemos ver cómo de gastadas estaban las pastillas, y el cable-testigo rozado por el uso (que al hacer contacto con el disco de freno enciende la luz del cuadro avisando del desgaste).
La diferencia de tamaño del elemento que roza sobre el disco es tremenda. Ahora procederemos al montaje. Colocaremos en la nueva pastilla el cable-testigo. Únicamente tienen una posición de montaje, por lo que no dan problemas.
Si el pistón se ha introducido por completo en su alojamiento la nueva pastilla ha de entrar en su sitio sin ningún esfuerzo. Se recomienda engrasar ligeramente los cantos metálicos superior e inferior de la pastilla para que no de problemas al introducirla (Haynes). Este es el aspecto que presenta el conjunto.
Ahora haremos el mismo proceso con la pastilla gastada del otro lado del disco. No recomiendo sacar ambas pastillas gastadas a la vez porque al empujar un pistón, se nos puede volver a desplazar el contrario de nuevo hacia el disco y nos de problemas para introducir las nuevas pastillas al existir de nuevo menos espacio entre el pistón y el disco.
Este es el aspecto que presentan las dos pastillas con sus cables conectados.
Ahora montaremos los muelles anti-ruidos. Como son similares no importa intercambiarlos. La colocación es muy simple. Sólo hay que tener la precaución de no clavar las puntas de esos resortes en los guardapolvos de los pistones. Podemos ver como quedan los resortes una vez montados en la pinza.
Ahora, y casi para finalizar, volvemos a colocar los pasadores gruesos que evitan que se escapen las pastillas de las pinzas. Hay que introducir esos pasadores por los orificios que a tal efecto tienen las pastillas, y dejar por detrás el muelle, como se muestra en la imagen.
Para rematar el trabajo, conectar los dos cables del testigo de desgaste en su sitio correspondiente. Es posible que tengamos que ayudarnos de un destornillador para empujarles puesto que suelen estar bastante duros; y colocar los cables de manera que no sobresalgan de la pinza y puedan rozar con la llanta o con el disco de freno. Colocar los dos pasadores dorados que traban los pasadores gruesos y ya tenemos el trabajo terminado en una pinza.
Montaremos la rueda, bajaremos el coche de nuevo al suelo, retiraremos el trapo y la bolsa de plástico del depósito de líquido de frenos y pisaremos el pedal de freno para que los pistones salgan de su alojamiento y presionen las pastillas nuevas contra el disco.
Los fabricantes recomiendan no realizar frenadas enérgicas durante los primeros 200Km de uso de las nuevas pastillas.
Espero que os sirva de utilidad… En breve tendré listo el brico de las correas.
Saludos.
